Manual para no aburrirse en caso de apagones

Es indudable lo mucho que dependemos de la energía eléctrica en esta era moderna. Pero si vives en Venezuela, esta dependencia y necesidad se vuelve más apremiante, puesto que los venezolanos, gracias al Socialismo del Siglo XXI, indudablemente, padecemos de la carencia de este necesario e imprescindible suministro de energía casi a diario, encontrándonos desgraciadamente ya al nivel de los países más pobres del continente africano o  sin ir muy lejos, la devastada Haití, en lo que a calidad de vida se refiere.

Es por esto que, como un afectado más de esos múltiples y constantes apagones, del inevitable calor y la desmedida mentadera de madre que ellos traen consigo, se me ocurrió hacer este post, como una vía de desahogo a mi inconformidad e impotencia. A continuación les muestro algunas interesantes opciones de las que se pueden servir en estos repetitivos y constantes momentos de nuestro día a día en Venezuela: 

• Leer un buen libro (sólo si es de día o tienes velas): De seguro que han descuidado este hábito por estar pegados en el Facebook jugando Los Sims o etiquetando a gente en fotos que nunca verán. O por el contrario, se la pasan pegados en Twitter, chanceando. Si la luz se fue, ya es hora de hacer algo productivo por sus vidas, así que revisen sus bibliotecas, mesas de noche y gabinetes del baño, que de seguro algún libro medianamente bueno deben tener por allí. Así sea algún libro de Paulo Coelho que vino de regalo con el periódico, o alguna revista de esas dominicales. Cualquier cosa, lo que sea, es bueno pa’ leer y recordarle a esas resecas neuronas lo que es interpretar párrafos de más de 140 caracteres. A los amigos que “aprendieron” a leer en la Misión Robinson o similares la cosa sí que se les pone cuesta arriba, pues dificulto que logren seguir el hilo de más de una página de revista, libro o suplemento. Sigan leyendo Panchita y buscando el triple ganador escondido en esas caricaturas pseudo pornos; no les queda de otra. ¡Pero lean!

• Hacerse la limpieza nasal (mocos, pelitos y puntos negros): Si van a hacer esto en presencia de otros o en lo más absoluto de su oscura intimidad, esto dependerá  de su grado de desfachatez. Pero sea de la manera que sea, siempre es bueno mantener esta zona de nuestras caras libre de partículas que nos dificultan la respiración, o que nos afean ante los demás. Sírvanse de esas uñas largas de sus dedos meñiques para extraer a esos verdes y resecos inquilinos nasales, de tijeras para cortar estos rebeldes pelos (no los arranquen, pues son muy dolorosos, lo sé) o de las fuertes uñas de sus dedos pulgares para extirpar (o “estripar”, coloquialmente hablando) a esas espinillas, barros, granos y otras impurezas alojadas en los poros de esta parte de sus caras. Cuando llegue la luz, de seguro tendrán un nuevo aspecto y sorprenderán a quienes les rodean.

• Limpiar el conducto auditivo (y hacer bolitas de cera): Muy similar al punto anterior, esta productiva actividad además de necesaria es placentera. Rascarse esta zona con la llave del carro, la punta de un bolígrafo (preferiblemente de color negro, porque si es de color azul o rojo, se notará), con la misma uña del dedo meñique mencionado anteriormente (¡Pero limpia de mocos para evitar la contaminación cruzada, obvio!) o con un fósforo (como bien he visto hacerlo a mis amigos fumadores), es una sensación muy rica, la verdad. ¿Verdad que todos ponemos cara de gato morboso cuando nos rascamos allí? Aprovechemos la oscuridad del apagón para que no nos vean esa cara tan graciosa que ponemos cuando lo hacemos y aprovechemos además de sacar toda la cera que podamos mientras dure este.

• Estrujarse los ojos y quitarse las legañas (lagañas): Según la RAE, cualquiera de las dos maneras que utilicen para denotar esas masitas verde-amarillosas que se forman en sus ojos está correcta. Hay gente que anda por la vida con esos ojos como un perro cazador inglés. Pues para estas personas es preciso ese momento de interrupción de la energía eléctrica para darle un aspecto menos vomitivo a esos ojos. Con los dedos, con pañuelos, con papel higiénico, ¡COMO SEA! Pero no desperdicien esta oportunidad de darse un cambio de look… Los que los rodean se lo agradecerán también (¡Y mucho!).

• Limpieza interdental: El mundo se divide en dos bandos: El de las personas que se sacan los restos de comida y podredumbre de sus dientes y encías SIN PUDOR, delante de los demás y el de los que no. Si Ud. pertenece al de la abrumadora mayoría (los SIN PUDOR), aproveche estos constantes apagones para hacerse este aseo sin importunar a los demás con las horrorosas muecas que hace para abrir su bocota y los escalofriantes hallazgos alimentarios alojados en su dentadura. Así se quitará esa nefasta (pero bien merecida) etiqueta de “cochin@”. Y aunque probablemente lo que se quite sea precisamente sólo eso: La etiqueta, no importa. A los que pertenecemos al otro bando, (el de la minoría) nos perecerá que el mundo es un mejor lugar para vivir al no verlos a Uds. hacer eso a la vista de todos y “a plena luz”.

• Chancear por SMS: Deben tomar en cuenta que esta es la opción para los que no cuentan con un Smartphone o ya sus megas de navegación se agotaron. Y ojalá que el apagón los haya agarrado con suficiente batería, porque una vez que nos adentramos en una entretenida sesión de éstas, lo que menos necesitamos es interrupciones de ningún tipo. Nada mejor que acompañar el calor ambiental (por la ausencia del aire acondicionado) con el calor corporal. Den rienda suelta a sus fantasías más oscuras y díganle a su pareja virtual lo que le harían si la tuvieran enfrente. Fantasee y sude, morbosee y sude… ¡Y goce! Probablemente no haya orgasmo, pero sí mucho sudor.

• Sudar (como tapa de sancocho): ¿Quién no? Sobre todo si depende del aire acondicionado por vivir en una zona calurosa del país. Axilas, entrepiernas, cuero cabelludo, espaldas y otras partes nobles del cuerpo sudarán copiosamente. Así que no se preocupe por esto, pues es una manera de que su cuerpo bote toxinas (y hasta de perder un poco de sobrepeso). Preocúpese más bien por mantener un buen aseo corporal, porque no sólo es desagradable ver a una persona empapada de sudor cerca de nosotros, sino que también es MUY deprimente que ésta huela a demonios. Pocas personas escapan a esta opción, así que no deje de leer el siguiente punto si no le gustó esta alternativa.

• Ducharse: Obviamente que a oscuras y con la respectiva totuma, por aquello de los apartamentos o casas que dependen de bomba eléctrica para el suministro de agua. Nada mejor que bañarse a oscuras para conocer nuestro propio cuerpo. ¡Tóquense! Báñense con esa agua helada guardada en pipotes y poncheras y sientan cómo se endurecen sus pezones. ¿No es excitante? Deje caer el jabón adrede y juegue a tratar de encontrarlo a tientas en la oscuridad (recomiendo particularmente esta opción si la ducha es en dúos [o en tríos, según sus gustos] y así se divertirá de lo lindo y hasta deseará que no vuelva la luz por un buen rato). Verá que en esos momentos de apagón, el cuarto de baño se volverá su lugar favorito de la casa. (Y probablemente hasta su familia crezca).

• Chismear con las personas que tenga cerca: Si vive en una ciudad pequeña, pueblo o caserío, hablar del capítulo de anoche de la novela, de la vecina zorra o del vecino chavista (entre otras cosas que habla la gente con mentalidad de pueblo, como “la calol”, por ejemplo) estará a la orden del día. ¿A quién no le gusta la vida ajena? ¿Quién no disfruta morbosamente de las desgracias y desventuras de sus vecinos, compañeros de trabajo y/o conocidos? ¡Por Favor! ¡A todos nos gusta! ¡Y si no nos gusta, por lo menos nos entretiene! Disfrute averiguándole la vida a todos los que le rodean, pero eso sí, tenga algo muy presente: Muy probablemente en la casa u oficina de al lado están haciendo lo mismo con Ud. y lo están descosiendo a chismes. ¿Qué creía, que era inmune a esto? Vivimos en un mundo de chismosos, ¿Y qué mejor momento que un apagón para murmurar a espaldas de los demás?

• Dormir (pero sudao’): ¿Verdad que el sopor que el calor nos da es a veces ineludible? Aproveche estos calientes momentos y deje que el cabeceo por el sueño le gane. Entréguese a los calientes brazos de Morfeo y aproveche la oscuridad del momento también. Duerma como un bebé, pero eso sí, recuerde que al despertarse de seguro va a estar “más sudado que interior de paralítico”, por lo que si tiene escrúpulos, báñese (leer de nuevo la opción de Ducharse), si por el contrario, no los tiene, quédese así, y échese talco (por lo menos) #fuchi.

• Jugar con el celular: Eso sí, nuevamente acoto que si no cuenta con un Smartphone, a lo que más puede optar es por jugar sudoku o la culebrita. Si por el contrario Ud. tiene un celular más moderno, le recomiendo ampliamente probar Angry Birds que es una opción adictiva y entretenida para todas las edades. Aunque hay muchas más opciones de juegos, claro está. Pero si lo que le gusta es jugar con pájaros, sean de la naturaleza que sean, entonces relea la opción de Chancear por SMS o vaya directamente a la opción Hacer “Cositas” (más adelante).

• Sacarle la chicha al iPod (con música, juegos, chateo, redes sociales y demás): ¡Gracias  a “Steve Dios” que existen esos aparatos! Nuestros apagones serían muy monótonos si no contáramos con artilugios tecnológicos como este. Es increíble lo que podemos entretenernos con ellos, pero eso sí, lamentablemente debe rezar por que la batería aguante el tiempo que dure el apagón. Si no sabe rezar, tampoco importa, porque de seguro los Evangélicos, Cristianos, Mormones y Testigos de Jehová aprovecharán ese mismo apagón para salir a la calle a predicarle a Ud., hereje del infierno, que el fin de los días se acerca. (Sólo espero que en el infierno sí haya más luz de la que hay en Venezuela. *Nota del autor).

• Jugar a las escondidas: Este recurso es muy útil, sobre todo para evadirse del trabajo y escaparse de esa cárcel/mazmorra/calabozo en la que de seguro se convierte ese lugar una vez que no hay luz (en algunos casos, con luz lucen peor). ¡Invite a todos, y ojalá que hasta su jefe participe! Y obviamente no sea tan pendejo para que sea Ud. el que tenga que contar. Haga uso de su viveza venezolana característica para librarse de ello, y una vez que el iluso asignado para tal fin empiece a contar, salga “como botellazo de puta” de su lugar de trabajo con destino a otro lugar. Preferiblemente a su casa o cualquier otro sitio más entretenido (que de seguro es en la dirección opuesta y muy lejos de allí). Jugar a las escondidas también es divertido y ÚTIL para evadirse de esas reuniones familiares fastidiosas, de las cenas aburridas con la familia del novio/novia o para escapársele a su esposa/esposo de la casa cuando dice: “Mi amor, aprovechemos este apagón para sentarnos a conversar, ¿Si?”.

• Hacer “Cositas”: Tirar, fornicar, copular, singar, puyar, hacer el amor o como sea que Ud. le diga al contacto genital entre las personas. Y las opciones aquí pueden ser muy diversas, si está en su casa, con su pareja, si está en la calle o la oficina, con su jef@ o con algún amig@ que esté GRRR (previo chanceo, claro está). Aquí los límites sólo los impone Ud. pues los matices para esta opción son tan variados, como variadas son las excusas del gobierno para tratar de explicar los apagones. No se limite sólo a irse al cuarto y a retozar sobre su cama, esto es para principiantes o gente aburrida. ¿Ha probado lo interesante que es estar en una biblioteca a oscuras?, ¿Un depósito de mercancías sin luz y sin aire acondicionado?, ¿El baño público del gimnasio, una vez que todos se han ido por el apagón y sólo quedan esa explotadota instructora de spinning y Ud.?, ¿La oficina de la jefa, con todo y las fotos de las vacaciones en Disney con el esposo?, ¿La cocina de la casa de los suegros, pero aun cuando estos no son “legalmente” suegros? (porque ya después pierde emoción), ¿La oficina del taller mecánico a donde lleva su carro a reparar, con su mecánico de confianza? (con las manos engrasadas o no, eso depende de su gusto), y así, podría pasar horas y horas enumerándole las diversas opciones posibles para aprovechar la ausencia de electricidad (pero no la ausencia de creatividad). Y si es de los que les gusta hacerlo con la luz apagada, ¿Qué espera? ¡No desaproveche esas oportunidades!

• Jugar al #YoConYo: Esto es en caso de no contar con alguien para Hacer “cositas” (punto anterior). Si se sospecha que el apagón va a ser muy largo, ¿Qué mejor que unja sesión de autocomplacencia, un “Auto Cariñito” como Dios manda? Así con todo y un baño previo (recuerde la ducha arriba mencionada). Pero aquí sí es verdad que tendrá que recurrir a los métodos tradicionales, tales como libros o revistas pornográficas, puesto que no hay electricidad para ayudarse con las entretenidas páginas para adultos en internet. O tal vez puede combinar la opción de Chancear por SMS con esta, para así dejar claramente demostrado que Ud. es un pajer@ recursivo de primera clase. Para los irremediablemente tecnológicos/geek/visuales, nada mejor que usar su Smartphone o iPod para tener unas buenas fotos o videos en la palma de su mano (mientras que en la otra… FapFapFap).

• Hablar por el teléfono fijo: Sobre todo si está en la oficina y la llamada no la va a pagar Ud., en estos casos recomiendo realizar llamadas de larga distancia (internacional, preferiblemente) y si es para hacer sebo telefónico o tener sexo por allí, ¡Mejor! ¡Que el desgraciado explotador de su jefe (o la empresa estatal para la cual trabaja) pague el recibo telefónico! Véalo como una muy sutil manera de vengarse de tantos años de explotación indiscriminada y de ascensos negados. Llame a su abuela (no importa que ésta se encuentre en el mismísimo infierno), llame a su tía la solterona chismosa que habla hasta por los codos o a su primo el ex convicto que ahora trabaja para el gobierno y de seguro se encadenará por teléfono para contarle de los logros del “proceso robolucionario”. Siempre es bueno estar en contacto con la familia, y hágalo a sus anchas.

• Hacer una lista de cumpleaños importantes: No dependa de Facebook y elabore una lista de las fechas de cumpleaños de sus amigos, familiares y allegados en su agenda, almanaque o celular. Así no habrá apagón que lo detenga a la hora de felicitar a la gente y siempre quedará bien parado ante sus amigos. Verá los puntos que gana con la gente cuando se toma la molestia de (aunque sea) mandarles un SMS el día que cumplen años. Lo recordarán siempre por eso. Y así cuando Ud. le pida favores a ellos, les costará más decirle que No. ¡Piense a futuro! ¡Esto es una inversión de tiempo muy valiosa!

• Hable con sus hijos acerca del sexo: Se sorprenderá de lo que ellos pueden enseñarle. Se dará cuenta de que “su bebecita” ya tiene 23 años, toma pastillas anticonceptivas y tuvo un aborto; o de que “el príncipe de sus ojos” estudia informática y administra una página web de masajistas. ¿Quiere saber de sexo anal? ¡Hable con su hija, que ya desde el 6° grado de primaria las niñas lo están dando! ¿Quiere saber lo que es una Pareja Swinger? De seguro Carlitos, su hijito de 16 años ya tiene 3 novias y hasta un Gang Bang ha hecho, cosa que Ud. todavía no. ¿Quiere saber en qué consiste el Bukkake? Pregúntele a Laurita, su hija de 17, que ya de seguro es popular en el colegio por sus “destrezas” en este tema. En fin, hable, pregunte, consulte, recuerde que los chamos hoy en día nos llevan una morena en lo que a información se refiere. ¡DOCUMÉNTESE y no se quede atrás! Aproveche “la luz” para iluminarse con información, para que en los momentos de “oscuridad” sus hijos no le digan con una sonrisa en sus tiernas caras: “O sea, viejo, tú no sabes lo que es el fisting??? ¡Qué mega fail, güón! ¡Me da burrrda de ladilla explicarte!”

• Jalar bola: Cualquier momento es bueno para echar paja y tratar de ganar favores por parte de los superiores o jefes. Chupe medias y lama botas como Ud. bien lo sabe hacer. Su cara brillante por el sudor (del calor, por el apagón) le conferirá un aspecto más creíble y digno de ganarse un Oscar, o por lo menos un aumento de sueldo o mínimo un bono. (Y unos cuantos enemigos más). Recuerde que Ud., como jalabola, es todo terreno. Con luz o sin ella, con luz blanca o amarilla, con planta eléctrica o velas, con frío o calor, con aire acondicionado o ventilador, Ud. estará allí jalando mecate del bueno. Eso sí, estimados jalabolas que lean esto, deben tener en cuenta algo: A medida que sucedan más apagones y Uds. jalen más bola, deben andar con más cautela, pues muy de seguro un día de estos se ganan una puñalada en algún lugar sólo y oscuro de sus lugares de trabajo. Y bien merecido que se lo tienen, debo decir. Los que se hacen llamar “revolucionarios”, “luchadores”, “patriotas”, “socialistas”, ¡Los chabestias pues!, evidentemente que son expertos en esta materia. (Pronto les publicaré un post a Uds. solitos, ¡Pendientes!).

Y es que las opciones son infinitas. Es sorprendente las cosas que Ud., Sr., Sra., Srta., viudo o solterona puede hacer cuando carece de esta preciada fuente de energía en su hogar, negocio o trabajo. 

De seguro que en este blog no están todas las alternativas que Uds., ocurrentes lectores, probablemente hacen. Así que los invito a solidarizarnos entre nosotros mismos, pobres pendejos sobrevivientes de este proceso “revolucionario” retrógrado de mierda y a compartir sus ocurrencias aquí… (Porque todos sabemos que los boliburgueses no padecen de esta carencia).

Sirva este post como guía para no aburrirse de brazos cruzados a oscuras y para demostrar la prolija creatividad del venezolano promedio. (Y como muestra además de que los venezolanos aunque torpes, a la hora de elegir a sus gobernantes, estamos arrechos ya).

¿Vivir viendo? ¡Sí, cómo no! ¡Vayan a joder a otro con ese cuento!