Debo admitir que me equivoqué. AFORTUNADAMENTE me equivoqué.
Si leíste mi post anterior respecto a las elecciones del 6D, mis augurios no eran nada buenos. Yo no apostaba nada por la oposición venezolana. Y no es que ahora sea su más ferviente seguidor. Simplemente celebro lo que muchos: parece que soplarán vientos de cambio y de recuperación nacional, empezando por la Asamblea Nacional.
No me trasnochaba políticamente desde el 2013, cuando Maduro “le ganó” a Capriles. Esa noche me dormí con un mal sabor de boca que no olvidaré. Me acosté con esa… arrechera…
¡Pero anoche fue distinto!
Sí, estuve 5 horas en cola, me quemé la cara, los hombros, el cuello y las manos, pasé calor, cansancio, hambre y sed en la cola para votar. La máquina de mi mesa se dañó 4 veces… pero la gente empezó a hacer chistes, a hablar, a “matar el rato” con tranquilidad y respeto, aunque apoyaran partidos distintos. Ya se respiraba un aire nuevo…
Y luego de las abusivas 6 horas de espera, salió Tibisay Lucena, con tos, con los lentes torcidos, afónica, temblorosa, despeinada, a demorar los anuncios con redundantes y melosos “actores y actoras, protagonistas y protagonistos, periodistas y periodistos…”
¡Y boom!
Se confirmó la bomba que se rumoreaba: por lo menos 113 curules. Tibi anunció 99 para oposición y 46 para el oficialismo, pero todavía faltaban estados por confirmar.
Luego, miles de memes, abrazos, oraciones, bendiciones, agradecimientos y sonrisas en las redes sociales… todos trasnochados pero contentos.
¿Y la cara de Maduro y su combo? UN POEMA para nunca olvidar.
¿Qué pasó con el 1X10 infalible? ¿Dónde les quedó su victoria perfecta? ¿Qué pasó con el pueblo EMINENTEMENTE CHAVISTA?
¡Pura paja!
La gente está arrecha. Ya la gente se empezó a cansar, y esto es una muestra. La gente no votó (por lo menos yo no lo hice) por una propuesta de la oposición, sino por cambiar la cagada socialista. Eso deben analizarlo MUY BIEN los que hacen política.
Y sí, Maduro tenía razón cuando dijo que “la guerra económica nos derrotó”. La destrucción del aparato productor, la lapidación de los ingresos petroleros en subsidios y ayuditas a los demás, la expropiación inescrupulosa y el pie en el cuello de los empresarios se les revertió en su derrota. Lee bien, chavista: DE-RRO-TA.
Ya Chávez no está. Ya este país se merece algo mejor. No es posible que países como Panamá, Perú, Chile o Costa Rica, con menos recursos y población que nosotros vivan mejor y tengan de todo lo que nosotros no. No se justifica la desbandada de profesionales hacia el exterior, la separación de familias y la persecución de todo aquel que piense distinto.
Pero ya hoy amaneció. La vida sigue. Los problemas siguen allí. Las colas, la escasez, la inseguridad y la inflación no van a cambiar hoy, ni mañana, ni en enero…
La solución de todo este peo no está únicamente en las manos de los recién elegidos parlamentarios. Recuerda que ellos son POLÍTICOS, y los políticos NO SON GENTE, (bueno, sí lo son, tú me entiendes). Pero también recuerda que tú, como ciudadano, como elector, tienes el poder de reclamar, de auditar y de quitarlos de sus cargos si no lo hacen bien. Haz buen uso de ese inmenso poder que tienes.
No esperes 17 años más. No seas pasivo.
Este país necesita de nuevo una alternabilidad política, políticos de altura, poderes independientes, que no exista una reelección indefinida, que no exista inmunidad por el apellido Chávez, Maduro o Flores. Venezuela necesita empleados públicos EFICIENTES, inversionistas y empresas que apuesten por el país… pero lo más importante: VENEZOLANOS QUE TRABAJEN, que no mendiguen una casa, un taxi, una nevera o un cargo político…
Eso se acabó.
¡Pero cuidado! La oposición, MUD, o como quieras llamarlos, deben jugar vivo también. Deben ser más inteligentes. Deben hacer y demostrar. Si roban (que siempre lo hacen), que se note menos que sus logros para el país. Deben evitar esa “política de barrio” que implantó Chávez, esa descalificación y mamarrachismo al que lamentablemente nos acostumbramos. Deben evitar caer en el juego de los rojos, como bien lo hicieron en la campaña antes del 6D…
Y para desmentir mi post anterior, Venezuela no amaneció enratonada, amaneció trasnochada, pero trasnochada con gusto.
¡Qué bueno que me equivoqué!
Y tú, ¿Estás dispuesto a trabajar por tú país? ¿O piensas DE NUEVO dejar TODO EN MANOS DE LOS POLÍTICOS?
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